Errejonismo

 Como ya te hablé en otra ocasión, lo menos que puedo esperar de alguien que pretenda ser mi dirigente es que sea más inteligente que yo. Ya hemos tenido suficientes catetos intelectuales detentando el poder.

Aclaro que, del mismo modo que no medimos la masculinidad por los centímetros que tenga tu polla, tampoco medimos la inteligencia en función de los doctorados. Digo esto porque hay mucho susceptible que se cree inferior por no tener un título, como si el título tuviera la culpa de su inferioridad.

Hoy te animo a que veas esta conferencia en la que Íñigo Errejón diserta sobre lo que más sabe y de la que he extraído algunas citas. Es una de las razones por las que creo que Podemos.

• Quien fija los términos y las condiciones de la contienda empieza ganando, por lo menos, la mitad ésta.

• Quien determina el lenguaje y las razones en torno a los cuales se constituyen los bandos ha empezado la batalla, seguramente, con el 51% o el 50% ganado.

• Lo fundamental en una relación hegemónica no es sólo que lo vean los que están de acuerdo contigo; es que incluso los que no están de acuerdo contigo se vean obligados a pensar y a discutirte con tus categorías y tus términos. Es decir, que con determinadas explicaciones que has dado, con un relato de lo real,  has sido capaz de construir un marco en el que, incluso tus adversarios, te tienen que contestar. Mis adversarios tienen que utilizar mis categorías para desafiarme. Me podrán ganar, pero cuando lo hagan, ya no serán los de antes. Me han ganado a condición de ser un poco yo, de parecerse un poco a mí.

• Se ha producido una mutación cultural de tal calado -a menudo más profunda, pero más difusa que los cambios institucionales- que va a modificar las pautas de relación, de manera que el adversario que te gane, porque siempre puede haberlo, habrá "pagado" el precio de parecerse mucho a ti y haber heredado una buena parte de tus contenidos.